
La lavadora se puso celosa de tu aparición,
desde el patio ha mirado como andamos desnudos por la casa,
no escucha la puerta de la calle,
incluso, se aflige por nuestra alimentación.
Piensa que no será útil y que tendrá que ser desechada.
La muy tonta no ha notado que en dos semanas le hemos juntado ya cinco juegos de sábanas.
1 comentario:
Jajajajajaja...
¡¡¡NOOO!!!
Quita esa canción, quítala, está maldita, está triste, no estoy lista para escucharla desde hace muuuuucho...
Ya...
Cerraré el blog...
AHHHHHHH
Publicar un comentario